Inma, Paloma, Marisa y Guillermina con la bailaora, Angelita (en el centro de la foto)
Marisa y Guillermina con los bailaores, Sergio y Andrés
Hace ya algunos años, tuve la satisfacción de tomar clases y cursillos con este maestro y tengo un grato recuerdo de su enseñanza de la SOLEÁ, elegante, bailada con un estilo muy característico que, sin duda, pude revivir en este espectáculo.
Le acompañaban dos guitarras, cantaores, una bailaora y dos bailaores. La bailaora y los bailaores, con una gran técnica, marcaron un cambio de estilos propios de estos años, en las que quizás, el virtuosismo de los zapateados ha dejado a un lado el bailar con más movimiento y encanto, como antaño se hacía.
Guillermina |